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Redacción
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¿Vas a aprovechar lo que queda de verano para realizar un viaje largo? Cualquier excusa es buena para viajar y conocer nuevos lugares. A veces el coche es lo más cómodo, rápido y barato, pero ten en cuenta siempre tu seguridad. Aquí te dejamos unos pequeños consejos para que solo tengas que preocuparte por disfrutar de tu destino.
Recomendaciones básicas
El primer paso antes de realizar un viaje largo es llevar tu vehículo a un taller de confianza en el que realicen una puesta a punto del mismo. Un pequeño arreglo de última hora puede ahorrarte disgustos en el viaje y una avería mayor a largo plazo. Tras esta revisión puedes emprender tu aventura, siempre siguiendo las normas básicas de circulación. Recuerda conducir de forma tranquila, sin agresividad, y ajustar la velocidad según los límites de la carretera. No solo tu seguridad está en riesgo sino la de todos los ocupantes del vehículo y el resto de personas que circulan por la vía. Lo importante es llegar a tu destino, no el tiempo que nos lleve.
Realizar paradas frecuentes
La DGT recomienda realizar paradas cada dos horas y descansar durante 15-20 minutos. Es importante que estires las piernas, descargues la tensión y te hidrates. Estas pausas además de evitar distracciones por el cansancio, permiten que tu vista también descanse. Según recoge la DGT, desde la Asociación Visión y Vida se indica que una mala visión a 120 km/h multiplica por 10 el riesgo de accidente.
Evitar los dispositivos móviles
No te olvides el teléfono móvil en tu viaje, te permitirá realizar fotografías inolvidables y estar conectado con el mundo exterior en todo momento, pero recuerda no utilizarlo al volante. Utilizar aplicaciones de mensajería instantánea al volante puede aumentar en más de un 100% los riesgos de sufrir un accidente. Por otro lado, hablar con el móvil, incluso con manos libres, hace que el conductor no perciba hasta el 40% de señales.
Aquí te dejamos unas pequeñas recomendaciones para que puedas llegar al destino sin ningún percance por el camino. Recuerda respetar las normas de circulación, realizar paradas con frecuencia y evitar cualquier distracción al volante. Tu seguridad y la de todos está en juego.
